¡La omnicanalidad no es una opción: es la nueva realidad!

Combina lo mejor de lo digital y lo físico para conquistar a tus clientes.

Hoy quiero contarte algo que cambiará la forma en que ves tu negocio:

Cada vez es más evidente que, como clientes, nos movemos entre el mundo en línea y el físico como si fueran uno solo. 

¡Exacto! Vamos de la web a la tienda, de la tienda al celular y así sucesivamente. ¿El motivo? Cada canal cumple su papel y, en vez de sustituirse, se complementan perfectamente.

En el sector automotriz, por ejemplo, la búsqueda de información se hace en línea: comparamos precios, modelos, leemos reseñas y hasta vemos unos cuantos videos en Youtube. 

Para el caso de los vehículos, normalmente la evaluación final del producto ocurre en persona, donde nos subimos al auto, vemos sus acabados, olemos el interior. Este es un claro ejemplo de cómo lo digital abre el apetito, mientras la tienda física cierra el negocio.

Piensa cuando investigas un nuevo teléfono en la web (webrooming) y después lo compras en una tienda para verlo en vivo. 

¿Te has probado la ropa o zapatos en una tienda (showrooming) y los compras en línea buscando el mejor precio o un color que no estaba disponible? 

En ambos casos, cada canal empuja la venta de forma distinta, y el desafío es orquestar esa experiencia sin fisuras.

Si todavía no has pensado en cómo unir todos tus canales en un solo embudo de marketing, este es el momento perfecto para empezar. Pues el 2025 será el año en que, gracias a la IA y las compras en vivo, todo sea más simple de implementar.

¿La clave? Hacer que cada paso, cada clic, cada visita, cuente hacia el mismo objetivo: conquistar, enamorar y guiar a tu cliente con naturalidad hacia la compra, sin importar si empieza en tu web y termina en tu tienda o viceversa.

Un abrazo,

Néstor

P.S. Cuéntame cómo usarás este enfoque omnicanal en tu negocio. ¡Me encantaría leer tu idea!