Un perfume y un orgasmo
El placer de dar placer
La primera vez que sentiste placer seguro no la recuerdas, o si?
Seguro la olvidaste…
¿Estás recordando algún momento placentero? A que sí!
Vamos, no te sientas culpable… todos los tenemos.
Algunos afortunados a diario.. Ya me entiendes
¿Has visto la publicidad del chico tomando CocaCola y su cara de placer? , o acaso la cara de la chica que después de aplicarse un perfume prácticamente tiene un orgasmo?
A que ahora mismo, piensas en una Coca Cola y un aroma placentero.
Pero algo dentro de tí, te dice !Culpable! …
No deberías estar pensando en eso, que algo no es bueno… que es malo, o alguna tontada de esas que nos decimos a nosotros mismos.
Pues déjame contarte que estudios académicos científicos han logrado demostrar algo que pudiera ser totalmente transformador en la forma en que le brindas servicios a tus clientes.
Pero Nestor, qué dices.
No lo digo yo!, Lo dice Freud, y sus seguidores del psico-análisis.. Que ahora se llaman analistas de mercadeo (jejee.. Esta es mía, perdón)
Y qué es lo que han descubierto entonces?
Pues que las personas no se sienten culpables por el placer que disfrutan en realidad, sino que se sienten culpables por no ser capaces de obtener más de eso y experimentar aún más placer.
Entonces,
¿Tu servicio crea placer en tus clientes?
¿Los hace sentir culpables por no poder disfrutar más de tu servicio?
¿Lo tienes?
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